Gran parte de la economía de nuestro país se centra en el sector de turismo. Esto produce que multitud de personas que trabajan en este campo vean reducidos sus ingresos y, por lo tanto, paralicen cualquier transacción inmobiliaria que vayan a llevar a cabo. Las semanas que vivimos de alerta por el virus COVID-19 provocan que la mayoría de los trabajos deban ser reformulados para que la sociedad siga funcionando y que así, el impacto económico y social sea menor.
En cuanto a todo lo que engloba el sector inmobiliario, vamos a observar en los distintos campos las consecuencias que están teniendo y cómo se pueden paliar:
El coronavirus en la construcción.
La actividad constructora continúa en movimiento, de momento, desde el estado de alarma decretado por el Gobierno. Las asociaciones informan que las obras en curso podrán seguir siempre y cuando cuenten con un plan de seguridad y salud aprobado, lo que es obligatorio en todas las obras de construcción que precisen de la redacción de un proyecto de ejecución.
Desplazarse hasta el puesto de trabajo sí que está permitido y es en lo que se avalan las constructoras para no paralizar las obras. Ya que este tipo de empresas no pueden desarrollar su actividad en remoto, aunque deben extremar y reforzar las medidas de prevención y seguridad para los trabajadores.
Con esto, los proyectos y con ello los arquitectos siguen trabajando para realizar nuevas construcciones, rehabilitaciones, etc.
Venta de inmuebles.
El valor de los inmuebles no ha sufrido una repercusión directa del virus. La única influencia que se percibe es del estancamiento de la compra venta de inmuebles ya que actualmente no se pueden firmar contratos de arras o de compraventa según las estipulaciones del gobierno decretadas por el estado de alarma y por el colegio de notaría. Mientras que esta suspensión de las operaciones no se prolongue durante mucho tiempo, dicen los expertos que no afectará notablemente al valor de la vivienda.
Esto no quiere decir que se deban dejar de vender o comprar los pisos. Simplemente existe un parón, se puede ir adelantando trabajo como tener en cuenta lo que nombramos en este artículo sobre la compra de una vivienda.
Además, actualmente con las tecnologías que disponemos, se pueden realizar visitas virtuales a los inmuebles, o bien mediante video-llamadas o aplicaciones de videos, aprobando o descartando inmuebles para futuras visitas.
Tasaciones inmobiliarias.
La valoración de un inmueble está sujeta al mercado que le rodea. Teniendo esto en cuenta en el método empleado de comparación, el mercado inmobiliario fluctúa, pero no se ha visto directamente afectado, de momento, por el movimiento que estamos viendo en la bolsa estas últimas semanas.
Desde Aguirre y Baeza continuamos con la actividad de la empresa, por lo que seguimos ofreciendo realizar informes de tasación.
Se debe tener en cuenta que existen varias opciones a la hora de realizar una tasación:
Tasación con visita interior.
Se debe tener en cuenta que para realizar una tasación, dependiendo de la finalidad es necesario, o aconsejable, realizar una visita al inmueble y así poder realizar las comprobaciones pertinentes, tal y como mencionamos en este artículo.
Con la situación actual, tomando las medidas sanitarias y de seguridad oportunas recomendadas por la OMS, se pueden realizar visitas a inmuebles. Con estas visitas, se puedan realizar todas las comprobaciones oportunas. Los técnicos expertos realizarán la visita donde el contacto es mínimo, haciendo fotografías del inmueble y mediciones del mismo.
Tasación sin visita interior.
Se puede realizar a su vez tasaciones con visita exterior donde se compruebe el estado exterior del inmueble, las lindes, etc. Y tomando como estado interior de la vivienda calidades medias a la hora de comparar con otros inmuebles.
Este tipo de tasaciones tienen la validez propia de una tasación, no cumpliendo con la norma ECO 805/2003, por lo que no se puede usar como tasación hipotecaria, aunque sí cumple para el resto de finalidades. El valor obtenido es muy similar al de con visita interior, aunque no realice la comprobación de superficies y calidades.